Bitácora del viajero del viento

martes, marzo 21, 2006

Qué lejos quedan los intercambios.

Acabo de recibir una impactante visión que me ha trastornado mi paz mañanera. Iba en el autobús hacia el trabajo, y cuando Pio XII gira hacia Avenida del Ejército, veo en la acera de la Vuelta del Castillo un grupo de chavalitas que iban con faldas demasiado cortas para los 7 grados de esta nubosa mañana. Me fijo mejor y veo que es un grupo de extranjeros, alemanes, diría yo. Me fijo mejor, y me doy cuenta que en la cabecera de la expedición sobresale una bigotuda y larga figura que me es algo familiar. ¡Era Herr Möhring! Herr Möhring era el profesor de español en el Colegio alemán con el que hacía intercambios nuestro colegio, el San Cernin. Sí, el que se picaba cuando le decíamos Moringo, el que invitaba a guapas estudiantes francesas a su casa en verano, el que se ponía ese ridículo sombrero y botas de Cow-boy con las que conquistó a una profesora de nuestro colegio (la Molestina),… Estaba igual que siempre, con sus alumnos del Paul Klee Gymnasium de Overath. Me he sentido mayor, y he sentido lo lejos que quedan aquellos tiempos del colegio (¡Fui a Alemania en 1992-93-94!). Benditos intercambios, y bendita juventud.

martes, marzo 14, 2006

Las dos Javieradas.

El sábado fue un día grande. Se celebraba la Javierada 2006, llamada “del quinto centenario” por motivos obvios. Después de que Brechas hubiera planeado una mega-costillada en las inmediaciones del castillo del Santo, el tiempo se vengó de que no le hubiéramos tenido en cuenta y nos ofreció un viernes de lluvia, frío y viento de esos que no te permiten estar seco ni quince minutos en la calle. La lista de bajas empezó a ser preocupante hasta el hecho de peligrar la excursión, pero al final, un selecto grupo de cinco decidimos afrontar lo que viniera, y nos preparamos para salir al día siguiente.
El sábado amaneció lluvioso y salimos bastante tarde y con pocas esperanzas de conseguir otra cosa que una buena empapada. Nos juntamos Mariaje, Silvia, Gabriela, Brechas y yo en dos coches. El plan era dejar a Brechas en Lumbier, para ir los otros cuatro a Javier, dejar un coche, y con el otro volver a Liédena y hacer los últimos 14 kilómetros de peregrinación. Para nuestra sorpresa, poco después de Monreal dejaba de llover, y antes de Loiti lucía el sol (sol que llevaba varios días sin aparecer por Pamplona). Brechas pidió que lo soltáramos en Loiti y así hicimos.

Los peregrinos
Aquí estamos los "peregrinos": Mariaje, Gabriela, Silvia y Brechas

Nos juntamos los cinco en Liédena, y desde allí nos separamos, Silvia y Mariaje decidieron ir por Yesa (Allí estaban Checho y Paula esperándolas) y Brechas, Gaby y yo fuimos por Sangüesa.


Biomasa
Gaby y Brechas pasando por delante de la planta de Biomasa que tiene Acciona Energía en Sangüesa

Caminamos hasta el cruce hacia Javier a un buen ritmo y bajo un solete muy agradable y a partir de ahí nos juntamos con el Via Crucis.

Viacrucis
Empezamos el Via Crucis con un solete estupendo

El ritmo cansino, las ganas de comer y el cambio de tiempo hicieron el último tramo algo más pesado, pero nada que ver con la sensación de agotamiento físico sentida en las Javieradas de verdad. Llegamos al Castillo para la misa Mayor con una lluvia fina. Había muchísima gente a pesar de las predicciones del tiempo y nos costó juntarnos con los demás.

Castillo de Javier
En Javier nos reunimos todos.

Fue una misa llena de cantautores que animaban a los presentes con sus oraciones cantadas. La canción que más nos impacto a Brechas y a mí fue la de un tal Valverde “Caminamos a la luz de Dios, caminamos”. Fue muy gracioso porque unas señoras que estaban a nuestro lado se emocionaron y se pusieron a cantar y a saltar con nosotros... le miraban a Brechas alucinadas.

Cantautores
Brechas y yo cantando y haciendo llover.

Después de la misa, hubo un momento de desencuentro ya que ante la prisa para evitar el atasco de salida, Brechas decía que no se iba sin comprarse un martillo de caramelo. Compró un martillo para cada uno y yo compré unas almendras garrapiñadas (buenísimas). Cogimos el coche y vuelta a Pamplona. Llegamos hacia las ocho de la tarde.

Así termina la Javierada de día, y empezó la de noche. La otra “Javierada” reunía a Javier Oficialdegui, Javier Luquin, Javier Manrique, Javier Morentin, Brechas y unos pocos más a cenar en la famosa peña sanferminera “La Mutilzarra”.

El día de los Javieres
Ese día los "Javieres" estaban "un nivel por encima" de los demás


Organizado todo por el soltero de oro, incipiente gestor de eventos de ocio y cocinillas de lujo, Ofi “el crápula”, quien consiguió la presencia de Mikel, Emma, Sandra, Miguel, Aitor, Chus, Casellitas, además de los peregrinos Silvia, Gaby y un servidor y la pléyade de Javieres.


Ofi Chef
Ofi, se encargó de la comida.

Lo que ocurrió en la Peña no creo que sea extraño para nadie. Había vino abundante, y como la comida de diseño que preparaba el Chef Ofi, se retrasaba, pues le dimos al vino a gusto (no había dos botellas iguales, imaginaos la mezcla). Yo me puse a cenar medio bolinga y no era el único.

Cenita con vino
En la cena también corrió el vino


Ofi nos preparó (si me equivoco, corregidme) de primero una ensalada de escarola con naranja y almendras fritas y de segundo un solomillo de cerdo a la manzana con cebolla confitada. Riquísimo. Después vinieron los “Ofi Shots”.

Ofi Shot
Un Ofi Shot(R) para TIIIII.


Sinceramente, no me atreví a probarlo (tenía que conducir después). Hubo un poco de salsa, de embrutecimiento, de subirse a las sillas y mesas, etc. Lo pasamos muy bien, y nos fuimos retirando poco a poco.


Bailando salsa
Nos estamos uniendo a la moda "Mira quién baila"...

Fue una lástima que Brechas no pudiera poner ese DVD de karaoke que me había prometido. La próxima vez será.
Creo que aparte de la cena de Navidad, habría que estandarizar la cena de la “Javierada” y repetirla cada año,… y que cada año cocine un “Javier” distinto…

martes, marzo 07, 2006

Estreno del blog

¡Hola! ¡Bienvenido a mi blog!
Navegando por la red he observado que mucha gente que vive en el extranjero, utiliza un blog como medio de expresión. Me ha parecido una manera sencilla de poder hacer públicas las experiencias que me sucedan, especialmente dirigidas a aquellas personas que me son más cercanas.
Cuando me vaya (si es que me voy algún día) espero utilizar este blog periódicamente. También espero que la gente lo revise periódicamente y que pueda comentar algo de lo que lee de vez en cuando.
Ahora que lo pienso, no veo la necesidad de tener que esperar a irme a Chicago para empezar a publicar, seguro que si empiezo a contar las cosas que me suceden por aquí en Pamplona, unos cuantos amiguetes que viven a miles de millas naúticas de aquí, lo agradecerán.
EL BLOG DE ALBERTO QUEDA OFICIALMENTE INAUGURADO.
Un saludo a todos.